NUESTRO PROYECTO EDUCATIVO INSTITUCIONAL
La Institución ha definido su Proyecto Educativo Institucional [PEI] como«Educación Cristiana para la Formación y Transformación Integral Humana».
La referencia a “educación cristiana” conlleva impartir y modelar los principios y valores cristianos bajo parámetros bíblicos; creemos firmemente en la verdad biblica de Pr 22:6 que dice: Instruye al niño en el camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará.
Cuando se habla de formar, se hace referencia a todas las actividades educativas legisladas, planeadas y desarrolladas por la institución, con la participación de los estudiantes como agentes activos, con el involucramiento de la comunidad educativa como fuente propositiva y crítica de los contenidos y mecanismos, y donde se armoniza el crecimiento físico con las otras dos dimensiones: cognitiva y trascendental. El concepto de formación implica trasladar conocimiento al estudiante en forma apropiada, donde el educando como sujeto activo del aprendizaje pueda asimilarlo, evaluarlo y conceder los espacios para aplicarlo; de las experiencias de las prácticas continuas, el mismo conocimiento va adquiriendo nueva dimensión, mejorando el mismo y dando oportunidad a la exploración de conocimientos asociados.
El concepto de transformar da vía a la educación polimodal, donde los conocimientos, el ejemplo y la vivencia de principios y valores biblicos ayuda a cada miembro de la comunidad a impactar positivamente el entorno donde participa Creemos firmemente que una vida trasformada, por y en Dios, impulsan una transformación social, cumpliendo la institución educativa con mandato evangelistico de Mateo 28.19-20. De esta forma, la transformación promovida en un niño lo impulsa a creer, practicar y promulgar los máximos lineamientos y postulados que como individuo y como ser social suscribe, sin limitarlo en la necesidad de buscar un ser, un pensar y un actuar.
Por último, el término “integral humana” reúne el pensamiento de considerar a cada agente partícipe de la comunidad educativa como tripartita (espíritu, alma y cuerpo), dimensiones que deben tener un crecimiento positivo, armónico y continuo.
